Se editó como cara B de la hoy menos conocida «Rock-A-Hula Baby», formando parte de la banda sonora de la película «Blue Hawaii», para la que fue compuesta. Desde el primer momento destacó como una balada icónica y conmovedora.
Inspirada en la composición clásica francesa Plaisir d’amour de Jean Paul Égide Martini, la versión para Elvis Presley fue escrita por Hugo Peretti, Luigi Creatore y George David Weiss, la canción destaca por su emotividad y belleza lírica.
La melodía ha mantenido su relevancia a lo largo de las décadas, con versiones de diferentes artistas, siendo un símbolo perdurable de amor y romanticismo en la cultura pop .